lunes, 24 de mayo de 2010

La Copa del 35. Los cuartos de final.

La fase final del Campeonato de España, que comenzó con los enfrentamientos de octavos, se desarrolló por un cuadrante de emparejamientos que no precisaba más sorteos. Fue un sorteo dirigido en el que se presumía que los grandes y poderosos equipos llegarían a disputarse la final, desconociendo si el sorteo estuvo "preconcebido" o se debió al venturoso azar.

Por un lado del cuadro, el Betis Balompié, flamante Campeón de Liga, había tumbado al todopoderoso At.Bilbao. Un segunda, el Sabadell, hizo lo propio con el Celta. Un histórico Levante (primero del campeonato superregional) apartó al Valencia de la competición. El Barcelona desbancó fácilmente al Sporting.

En el otro grupo de emparejamientos que llevaban a la final, pasaron; el Zaragoza a costa del Oviedo, el Osasuna que dejó en la cuneta al Badalona, el At. Madrid que tras un partido de desempate doblegó al Racing y el Sevilla, que contra todo pronóstico, había eliminado al Madrid,vigente campeón.

En menos de un mes el fútbol de la ciudad de la Giralda, había dejado sin posibilidades de títulos al Madrid; el Betis le gana la disputa de la Liga y el Sevilla lo deja fuera del torneo del KO, del Campeonato de España.

Y llegan los cuartos de final.

Por una lado SEVILLA/AT. MADRID y OSASUNA/ZARAGOZA.

Por el otro BARCELONA/LEVANTE y BETIS/SABADELL

Vuelve el Sevilla a la capital de la República y la prensa y el público local comienzan una campaña de acoso y derribo al fútbol del decano hispalense. Lo tildan de haber abandonado la ciencia de la "escuela sevillana", aunque reconocen que si bien era más preciosista y vistosa para el espectador, era menos resolutiva de cara a los resultados para la conquista de títulos nacionales. En el fondo temían nuevos rivales que practicasen un fútbol más fuerte y de un carácter más luchador, un fútbol en definitiva más norteño. Una nueva amenaza a sus intentos de supremacía.

Partido de ida. 2 de junio de 1935. (2 a 2, Elícegui y Lafuente para los locales y dos de Bracero para el Sevilla)
Alineaciones;


En el Stadium Metropolitano se disputa el primer encuentro de cuartos. El partido, muy accidentado y rozando a veces la violencia por parte de los dos conjuntos, tuvo unos inicios arrolladores por parte del equipo local con el viento a favor y espoleado por su público, que abarrotaba el estadio, consigue adelantarse en el marcador y deja un 1-0 al descanso.En la reanudación, a los 15 minutos marca el Atlético el segundo gol ante la locura de los aficionados colchoneros. Minutos después en choque totalmente involuntario con Eizaguirre, cae lesionado Lafuente. Todas las crónicas hacen alusión a la involuntariedad del accidente, incluso se alaba la caballerosidad de Eizaguirre que dejando su marco desguarnecido, corre para atender al lesionado.
La involuntaria lesión del delantero madrileño turbó los ánimos de sus compañeros y el Sevilla se hizo dueño del partido. Un gol anulado por presunto fuera de juego de Campanal es la antesala de los dos goles de Bracero que equilibrarían la balanza y cuando el dominio andaluz era más atosigante, Campanal es lesionado tras una violentísima entrada que lo obliga a abandonar el rectángulo de juego. Los mejores artilleros de cada equipo se retiran del campo por lesión; uno tras choque accidental e involuntario y el otro por una violenta entrada.

El partido fue duro, con muchos encontronazos y contusiones. Juego viril de casta y coraje.


Como resumen de este primer partido nada mejor que este pequeño artículo; "Así es la Copa". La prensa madrileña, más que a la acometividad de ambos bandos, culpó de la rudeza del juego al colegiado -Sr. Steimborn"- que permitió el juego duro.

Recordemos que el partido se jugó en Madrid, con un campo abarrotado de un público enaltecido y predispuesto por una campaña antisevillana y antisevillista.

Partido de vuelta. 9 de junio de 1935. (3-2, López, Tache y Torrontegui para el Sevilla y Marín y Elícegui para el equipo madrileño)

Alineaciones;



Cuatro fragmentos de la crónica del periodista Antonio Olmedo, nos dan buena cuenta de lo que se amasó desde Madrid y de lo injusto de la campaña orquestada;

Sobre el terreno de juego se notaron las ausencias de los dos delanteros (Lafuente y Campanal) y el partido no fue bueno.

En la primera parte se adelantaron los sevillistas con goles de López y Tache. Ya en la segunda, Marín puso el 2-1 en el marcador y poco después Torrontegui marcó el 3-1. Elícegui estrechó el tanteador de nuevo con un 3-2 que hizo que el pitido final hiciese respirar a los sevillistas.

El Atlético de Madrid había caído eliminado. Al igual que 15 días antes el Madrid.

El Sevilla apeaba de la competición copera a los dos grandes equipos madrileños y dejaba a la prensa de la capital sin equipos a los que seguir en el devenir copero. Todo un jarro de agua fría.
Al día siguiente los titulares de los rotativos capitalinos dejaban a las claras lo dura que se hace a veces la derrota. Como un ultra cualquiera - o un de la Morena- el periodista deja su titular; "Gran partido del Athletic"...

Aquellos cuartos de final del Campeonato de España dejaron eliminados al Barcelona, al Betis (que cayó contra el Sabadell), al Zaragoza y al Atlético.

Unas semifinales con los grandes apeados de la competición se avecinaba. La prensa madrileña no pudo soportar aquella doble eliminación y comenzó una campaña de desprestigio sobre los supervivientes.

Fuentes; Hemeroteca ABC y Hemeroteca digital Biblioteca Nacional.

1 comentario:

cornelio dijo...

Ya me he estudiado las alineaciones y los árbitros. (je, je)

Gracias, don Antonio por estas lecciones de historia, "en tiempo real".

Deje los gradientes para otros, enhorabuena.