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Era el último representante del equipo que se coronó campeón
de Liga en 1946. Con 399 partidos disputados, nadie ha superado su marca bajo
de palos.
Tristísima noticia la que sacude este domingo al Sevilla FC.
José María Busto, el más grande de los porteros que ha tenido el equipo
nervionense en toda su historia, con permiso de Andrés Palop, ha fallecido a
causa de una trombósis pulmonar. Busto, nacido en Portugalete pero afincado en
Sevilla, concretamente en su Triana del alma, tenía 87 años, 16 de los cuales
militó en el conjunto del Sánchez Pizjuán, conquistando la Liga en la 45/46 y la Copa en 1948 y ostentando el récord de partidos bajo de
palos, con 399, hasta el punto de que es el quinto sevillista con más choques,
sólo superado por Blanco, Arza, Jiménez y Campanal.
Busto ha sido uno de los emblemas más gloriosos del Sevilla
FC desde que colgara las botas a finales de los cincuenta, siendo, asimismo,
técnico del Sevilla y del Sevilla Atlético en ocasiones puntuales. Su carisma y
categoría fue reconocida hasta la actualidad, pues de hecho la Entidad , de manos de su
presidente José María del Nido, le concedió en noviembre de 2009 el segundo
Dorsal de Leyenda. El mismo Del Nido, que nunca ocultó su predilección por el
que fuera el guardián del campeón de Liga, visitó a Busto el pasado mes de
octubre en la Residencia Nuestra
Señora de la Consolación ,
donde residía junto a su esposa. Con él, se va el último vestigio de aquel
equipo mítico que se coronó campeón de Liga un lejano 31 de marzo de 1946 en el
desaparecido campo de Les Corts. Tiempos lejanos, campos desaparecidos, pero
una leyenda, la de Busto, que jamás morirá para el Sevilla FC.