domingo, 1 de mayo de 2011

Cambalaches de la historia

Hace algún tiempo, Enrique Santos Discépolo escribió un tango al que puso por título "Cambalache". No encuentro mejores palabras para definir lo que pasa hoy día en el mundo del fútbol dentro de España.


Que el mundo fue y será
una porquería, ya lo sé.
En el quinientos seis
y en el dos mil, también.
Que siempre ha habido chorros,
maquiavelos y estafaos,
contentos y amargaos,
barones y dublés.
Pero que el siglo veinte
es un despliegue
de maldá insolente,
ya no hay quien lo niegue.
Vivimos revolcaos en un merengue
y en el mismo lodo
todos manoseados.
Hoy resulta que es lo mismo
ser derecho que traidor,
ignorante, sabio o chorro,
generoso o estafador...
¡Todo es igual!
¡Nada es mejor!
Lo mismo un burro
que un gran profesor.
No hay aplazaos ni escalafón,
los ignorantes nos han igualao.
Si uno vive en la impostura
y otro roba en su ambición,
da lo mismo que sea cura,
colchonero, Rey de Bastos,
caradura o polizón.
¡Qué falta de respeto,
qué atropello a la razón!
Cualquiera es un señor,
cualquiera es un ladrón...

La manipulación, la desvergüenza, las artimañas más diabólicas, la mala leche y los despropósitos se acumulan en todos los órdenes.

En el capítulo relacionado con los estudios sobre la historia futbolística pasa igual. Lo mismo que se manipula una imagen para hacernos ver que Pepe no dio una brutal coz a Dani Alves, también se permite retocar imágenes para hacernos creer que tal o cual club no se fundó en tal o cual fecha.

El ZI-JEFE, a través de su revista digital Cuadernos de Fútbol, ha permitido la manipulación más burda y más rastrera conocida para atacar el nacimiento del Sevilla F.C. En la citada revista se ha consentido la publicación de un artículo lleno de ira y envidia con datos manipulados y sacados de contexto para engañar y sembrar de dudas la historia del Eterno Campeón de Andalucía, para poner por embaucadores a los primeros sevillistas, para manchar su honorabilidad y su memoria.

Coincide todo con la llegada al CIHEFE de ciertos personajes de dudosa reputación como el tal Inda (conocido por todo el sevilismo por el amor que profesa hacia nuestro Club -léase con ironía-) y con el control que cada vez ejerce con mayor autoridad otro individuo de apellido afrancesado, que no duda en buscar aliados en cualquier charco con tal de defenderse atacando.

El afrancesado teme que dejemos a su club en evidencia.

Tiene razones para ello. Nosotros también las tenemos.

Estén pendientes a la blogosfera sevillista pues se van desenmascarar poco a poco las mentiras y las falsedades del decanato del fútbol español. No es como lo habían contado. Se llevarán grandes sorpresas.

Mi amigo Juan Luis Franco se retira de Cuadernos de Fútbol.

Como él mismo dice "no le gusta la filosofía que presenta la historia como una reunión de tahúres". Lean su despedida AQUÍ

Pero antes de irse ha dado un golpe de autoridad histórica y vergüenza torera sobre la mesa. Antes de abandonar un barco que se va llenando de ratas poco a poco, ha dejado su última respuesta en un documento brutal que demuestra como se desmonta una manipulación.

Pueden leer el citado artículo desde el siguiente enlace;


Lo dicho.

Pendientes de las pantallas.

Mezclao con Stravisky
va Don Bosco y La Mignon,
Don Chicho y Napoleón,
Carnera y San Martín...
Igual que en la vidriera
irrespetuosa
de los cambalaches
se ha mezclao la vida,
y herida por un sable sin remache
ves llorar la Biblia
junto a un calefón.
Siglo veinte, cambalache
problemático y febril...
El que no llora no mama
y el que no afana es un gil.
¡Dale, nomás...!
¡Dale, que va...!
¡Que allá en el Horno
nos vamo’a encontrar...!
No pienses más; sentate a un lao,
que ha nadie importa si naciste honrao...
Es lo mismo el que labura
noche y día como un buey,
que el que vive de los otros,
que el que mata, que el que cura,
o está fuera de la ley...

3 comentarios:

https://s-evillistas.blogspot.com/ dijo...

Cada vez me sorprenden mas tus Post,son buenisimos.
Saludos Sevillistas

Tántalo dijo...

¡Qué falta de respeto,
qué atropello a la razón!
Cualquiera es un señor,
cualquiera es un ladrón...

Juan Luis dijo...

Gracias