Es el máximo responsable de esta tropelía de la que nos tiene preso. Su gestión al frente del Sevilla F.C. es un desastre económico para los sevillistas que ejercen y desarrollan su pasión carnet en mano. Desde su llegada, su prepotencia y sus aires de grandeza suponen una enorme y pesada losa para el aficionado que asiste, atónito, a este despropósito financiero.
Antes, hace unos años, el sevillismo militante llegando las calores de julio, renovaba su anual abono, más o menos baratito, y ya cumplía. A lo sumo, a lo anterior se añadía un par de eliminatorias de la Copa del Rey, a un precio asequible… y el día del Club, donde todos pasábamos por taquilla para ver al Madrid o al Barcelona. Rara vez, el aficionado tenía que hacer una pequeña aportación extra en partidos en los que había que jugarse un ascenso, o el no descender, y por cuatro o cinco euros llevábamos a un acompañante y así llenábamos el campo.
¡Qué fácil es llenar un campo con entradas de “veinte duros”!
Ahora no.
Ahora todo es distinto.
Ahora todo ha cambiado.
Desde un tiempo a esta parte se esquilman nuestros bolsillos de una forma alarmante.
No sé donde vamos a llegar.
El último ejercicio no ha podido ser más negativo. Al abono, no barato precisamente, tuvimos que ir adicionando el importe de las entradas de los partidos de Champions, y a esta suma, añadir los de Copa del rey; la puñetera manía de ir pasando todas las eliminatorias hasta encajarse en la final…
Y nos ponemos a hacer números y vemos nuestra economía por los suelos; abono, más abono Champions, más los octavos de ésta, mas todas las eliminatorias (menos la primera) de la Copa del Rey, más la entrada de la final, más el desplazamiento y avituallamiento correspondiente.
Una ruina.
La temporada pasada pasó exactamente igual, menos lo de la final de la Copa del Rey. Y la anterior chispa más o menos lo mismo, y las anteriores…que les voy a contar que ustedes no sepan de las anteriores.
Y lo que se avecina; más Liga de las estrellas, más Champions, más Supercopa, más Copa del Rey...
Y total para qué; ¿para tener seis títulos más en la vitrinas y ser campeones de España y de Europa y conseguir un par de trofeos al mejor equipo del mundo? ¿Para estar en la élite del fútbol mundial y europeo? ¿Para que en el Mundial aparezcan jugadores del Sevilla casi todos los partidos y nos conozcan en todos los rincones del planeta?
Lo dicho una auténtica ruina.
Pero, que siga esta desdicha.
Y que nunca pare.
Y la culpa es de Del Nido.
¡Gracias Presidente!
2 comentarios:
Una auténtica ruina Antonio.
Somos el Cofidis Club de Fútbol.
Esto va a ser lo que me decía un amigo de estos mitómanos verdolagas: "Eso de subiros los carnets y demás lo hace para que solo los ricos y los señoritos puedan ver al Sevilla, como siempre".
Cuanta razón tenía...
ES que no hay un mes de respiro.
¡Qué gloria de mundiales! En mayo todo "terminao".
Recuerdo cuando mi padre, con casi ochenta años entonces, me decía:
- Yo no quiero UEFA, cuando se juega hace mucho frío y yo no puedo venir...
Y ahora pasamos hasta calor en las supercopas.
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