lunes, 28 de febrero de 2011

Día de Andalucía

Hoy es el día de Andalucía. Hoy recordamos un día de frustración e indignación. Conmemoramos aquel plebiscito de 1980 por el que los andaluces pretendíamos alcanzar una autonomía plena.
A pesar de las condiciones “leoninas” que estableció el art. 151 de la Constitución para aprobarla en referéndum, y a pesar de la sucia campaña del gobierno a favor de la abstención –incluida la farragosa pregunta y los muertos que votaban- todas las provincias sortearon el listón y aprobaron la Autonomía plena para Andalucía.

Todas menos una; Almería.
La fecha del 28 de febrero se registró (de forma unilateral y sin contar con el pueblo) desde entonces como día de Andalucía.

Porque ya teníamos nuestro día de Andalucía desde 1977.

Para mi lo sigue siendo.
El 4 de diciembre de 1977 dos millones de andaluces se manifestaron para exigir la autonomía.

Quinientos mil manifestantes en Sevilla, alrededor de ciento cincuenta mil en Málaga, cien mil en Granada, ochenta mil en Huelva y en Córdoba, setenta mil en Cádiz, setenta mil en Jaén, diez mil en Almería, Ronda, Campo de Gibraltar y en Antequera y más de un cuarto de millón en Barcelona, emigrantes de la novena provincia.

Se pedía autogobierno, descentralización, inversiones, reforma agraria y sobre todo trabajo y libertad.
Aquel día se consideró como Día Nacional del País Andaluz.

Aquella jornada también tuvo su mártir. El joven malagueño García Caparrós murió tras una carga policial. El presidente de la Diputación de Málaga se negó a que la bandera andaluza ondeará en el mástil del edificio de la Diputación a pesar de haberse aprobado en el pleno.

Aquel 4 de diciembre el Sevilla jugaba en Cádiz. Era la primera visita al estadio Carranza en primera división.

Al salir al terreno de juego ambos equipos portaban una gran bandera andaluza. Una sola bandera, la bandera del pueblo andaluz.

Andalucía era la única protagonista.


Otros no entendieron el mensaje de aquella jornada y mezclaron la enseña andaluza con la española, restándole el protagonismo que la jornada requería. Los mismos que después se adueñaron de su simbología con una literatura barata y pueblerina.

----ooo----


Afirma tu esperanza, tu rabia, tu dignidad;
tu solidaridad con los que luchan y con los que sufren.
El 4 de Diciembre,
¡Viva Andalucía Libre!
Sea por Andalucía Libre, su pueblo y la Humanidad

viernes, 25 de febrero de 2011

THE FIELD (AL FOOTBALL EN VAPOR)

Por Guardianes de la Memoria.

El pasado 14 de septiembre, los Guardianes de la Memoria que tenemos blogs publicamos un artículo conjuntamente (La Palangana Mecánica, Voladizo de Gol Sur, Ayer y Hoy Sevillista, Sevillista Soy, Puerta15 y Algarivo), en el que mostrábamos el fantástico descubrimiento de Cornelio (significado Guardián) sobre lo que se podía leer en la prensa de Nueva Zelanda en 1891.
Hoy, 25 de febrero, se cumplen ciento veintiún años de aquella carta que marca la fundación del Sevilla Football Club.
Como no podía ser de otra forma, les traemos un regalo, por gentileza de Mr. White.
La noticia del The Otago Witness hablaba de “football in spain”, de fútbol en Sevilla más concretamente. El corresponsal aludía a un artículo publicado en “The Field, The Farm, The Garden, The Country Gentleman’s Newspaper”.
Supimos entonces que el Sevilla F.C. de 1890 había tenido un Presidente (el vicecónsul inglés Mr. Eduardo Johnston), un Secretario (Mr. Isaías White, sevillano, socio de la Portilla & White) y que el deporte del foot-ball se jugaba en Sevilla desde hacía años, “desde hace tiempo” pudimos leer .
Pero como buenos investigadores que somos, quisimos acudir a la fuente original porque las segundas versiones, generalmente, suelen perder contenido en el camino, deformarlo o, sencillamente, cambiarlo. Nosotros, como la mujer de César, no solo debemos parecer investigadores: tenemos que serlo.
Aquel artículo del The Otago nos pareció incompleto y sospechábamos que el primitivo debería contener más información. Es una deducción comprensible en prensa donde, como sabemos, la maquetación y la composición están sujetas a los espacios: las noticias deben procurar el mayor contenido posible ocupando la menor extensión.
Aparecido el 10 de enero de 1891 (ejemplar número 1985), se trata de un magazine londinense de John Crockford que salía los sábados entre, al menos, 1857 y 1933. Llegó a publicar cartas de Charles Darwin.
Dedicada a la vida al aire libre (de ahí su nombre: “El Campo, la granja, el jardín, periódico para los caballeros del país”), recogía todo lo que pudiera interesar a esos caballeros con tiempo para disfrutar de la naturaleza y ocupaba gran espacio en informar sobre los deportes. Abarcaba materias tales que caza, pesca, boxeo, rugby, remo, cricket, vela, arco, tiro, football…

Pues tras muchos meses de búsqueda incesante, hemos dado con el documento original (gracias Juan):
Traducido (y hemos puesto especial hincapié en lograr ser lo más exactos posibles), diría:
Fútbol en España
Un corresponsal nos envía lo siguiente:
“Se dice que allá donde se asientan ingleses, nunca se quedan contentos hasta que no han introducido sus costumbres y juegos nacionales; y los ingleses de Sevilla no son ninguna excepción. El fútbol ha formado parte durante años de las fiestas de Navidad en Sevilla, y el club está floreciendo bajo la presidencia del genial Vicecónsul Sr E. F. Johnston. El sábado 27 de Diciembre se celebró el partido con Huelva, convertido ya en un evento anual, en el hipódromo, donde se ha obtenido un excelente sitio gracias a la amabilidad de las autoridades. Casi todos los residentes ingleses estaban presentes junto a un buen número de españoles con muchas ganas de ser iniciados en los misterios del fútbol que, como describen los periódicos locales, se juega sin palos o cestas de protección. Los congregados no pueden quejarse del espectáculo ofrecido, pues asistieron a un partido rápido que terminó en empate, sin que ninguno de los bandos consiguiera marcar; por supuesto, las únicas críticas adversas fueron las de las damas españolas, haciendo referencia a las piernas y la actitud de los jugadores y no a su juego. Los zagueros de ambos equipos jugaron bien y sólo su excelente defensa permitió al equipo de Huelva escapar del desastre, mientras que los delanteros Welton y White para Sevilla y Birchall para Huelva estuvieron bastante discretos. Merece la pena mencionar al señor Geddes, de Sevilla, porque fue peligroso para amigos y enemigos al tiempo. El Vicecónsul realizó las labores arbitrales a la entera satisfacción de ambas partes. Tras el partido los dos equipos y sus amigos comieron juntos en el Hotel de París, bajo la presidencia del Vicecónsul. Se bebió con entusiasmo a la salud de su Majestad con honores musicales y todos disfrutaron de una tarde estupenda. El señor White contribuyó al éxito de la reunión de varias formas, y su amabilidad al llevar a los equipos en vapor al campo de juego se merece el mayor de los agradecimientos. El señor Palin, presidente del club de Huelva, anunció que se había concertado un partido entre un equipo español y uno inglés.
Sevilla: E. Plews (portero), H. MacColl (capitán), G.T. Charlesworth (defensas), D. Thomson, H. Stroneger, W. Logan (medios), H. Welton, J. White, J. Poppy, P. Merry y T. Geddes (delanteros).
Huelva: E. Wakelin (portero), Thomson, Jones (defensas), Norman, Oliver, Hodge (medios), Hopper, Mundell, Birchall (capitán), García y Birchall (delanteros).
Jueces de línea: Dr. Langdon (Sevilla), Sr. Bower (Huelva)
Árbitro: Sr. E. J. Johnston (Sevilla).


Nos amplía la información de manera sorprendente y nos proporciona datos desconocidos hasta ahora. Podemos, por ejemplo, saber con exactitud las alineaciones y observamos a tres sevillanos del lado de los nuestros (White, Welton y Merry) y en la parte onubense, ¿Oliver? y García.
Geddes, como ya sabíamos, resultó ser peligroso como amigo y como enemigo.
Las damas parece que no pudieron contenerse ante el muestrario de jóvenes en paños menores, espectáculo, sin duda, poco o nada habitual.
El escenario podemos verlo en la foto que sigue. El Hipódromo ocupaba lo que luego sería la Base Aérea de Tablada y el rio pasaba justamente por los terrenos donde hoy se ubica la Feria de Abril.
Recordemos que había un embarcadero junto al Hipódromo y de ahí el gesto destacado del D. Isaías trasportando a los contendientes: “El señor White contribuyó al éxito de la reunión de varias formas, y su amabilidad al llevar a los equipos en vapor al campo de juego se merece el mayor de los agradecimientos.”

Y para finalizar, espléndida comida en el Hotel de París con brindis, cantos y gran camaradería, como corresponde a los verdaderos y genuinos sportsmen.
Pero sobre todo hay que resaltar la frase “convertido ya en un evento anual”, lo que nos provoca no pocas preguntas:
¿Evento anual?
¿Desde cuántos años?
¿Cuándo fue el primero?
¿Se llegó a jugar el anunciado match del Sr. Palin entre las formaciones inglesa y española?
Son nuevas piezas que se van sumando en la construcción del puzle y que nos acercan, sin remedio, a la solución final del pasado de nuestro Club.
Porque el tiempo y los medios juegan a nuestro favor.


Guadalquivir, rio de mi Sevilla.

Dedicado a D. Agustín Rodríguez, sevillista, habitante reciente del tercer anillo y conocedor ya de TODA la Historia.

domingo, 20 de febrero de 2011

KINKÉ, LA LUZ DEL SUR (de Voladizo Films)

Dedicado a los Guardianes de la Memoria sevillista y especialmente a José Enrique, devoto de la pasión "kinkeriana".

Gracias a Cornelio por la primera parte de la banda sonora; a José Manuel, Carlos, Alejandro y José Enrique por aportar imágenes y a todos los que han contribuido a la ejecución de este "flin".

sábado, 5 de febrero de 2011

Un delantero llamado Juan Belmonte

De Triana salió uno de los delanteros más peculiares que han practicado el fútbol.
Hablamos de Juan Belmonte.
Todos conocemos lo que supuso para la tauromaquia la genial figura del “Pasmo de Triana” pero pocos conocíamos la atracción que causaba aquel higiénico sport llamado fútbol en este “Terremoto”.
-Oiga Ramírez; pero Belmonte nació en la calle Feria.
-Sí, pero los trianeros tienen dispensa para nacer donde les de la gana. ¿Capichi?
Sigamos.
De la mano de su hermano Manolo se aficionó al fútbol

Recordemos que los hermanos Belmonte (Manolo y Pepe) entraron en 1922 a formar parte de la Sociedad Sevilla FC, como ya comentamos en una anterior entrega. Las grandes sagas de toreros siempre soñaron en blanco y rojo.

Y Juan Belmonte se aficionó al fútbol y se convirtió en un apasionado seguidor del mismo. Tanto, que incluso llegó a formar dos equipos en su finca de Utrera como él mismo nos narra;

Solía acudir con frecuencia a los estadios sevillanos y se emocionaba hasta tal punto que no era infrecuente verlo de esta guisa;

Apasionado por la alta “escuela sevillista” se hizo fiel seguidor del juego que desplegaban aquel grupo de jóvenes sevillanos. Así nos lo cuenta recordando posiblemente aquella semifinal del campeonato de España frente al AT. Bilbao.


Listo como él sólo, se declaraba partidario de los dos primeros equipos sevillanos; el Sevilla y el Balompié, postura muy frecuente en aquellos años en la que no era raro que ciertos aficionados acudiesen a todos los partidos que se celebraban en Sevilla, y más aun conociendo la personalidad de Belmonte y su concepción de la fama y la popularidad;

"Cuando un hombre es tan popular como yo lo fui entonces, se debe a su popularidad. Todo lo suyo es un poco también de los demás: su intimidad, sus afectos y, desde luego su dinero. Y es hasta cierto punto lógico que así sea. El que gasta sus energías discutiendo sobre un torero en vez de gastarlas en trabajar, cuando necesita algo va a pedírselo al torero a cuya gloria consagra lo mejor de su vida. De ahí la obligación de ser rumboso que el torero tiene…. No se puede defraudar a los admiradores y partidarios".
-Juan Belmonte (Matador de toros) de Manuel Chaves Nogales-.

Pero no pretendemos convencer a nadie de que Juan Belmonte era sevillista, que lo era, sino relatar su apasionamiento por el fútbol y su amistad con los componentes del Sevilla F.C.

Ya hemos visto que incluso llegó a crear un equipo en su finca de Utrera. La finca tenía por nombre "La Capitana" y el nombre que dio al equipo fue el de Capitana F.C.

Belmonte era el delantero centro del Capitana F.C.

El mismísimo entrenador sevillista en la temporada 1924/25, Angel Villagrán, dijo de Belmonte:

"¡Es imponente tirando a goal! Con las dos piernas y con la cabeza. Es un hacha delante de la puerta. ¡Palabra! Yo mismo me hice cargo de su entrenamiento en La Capitana y no he visto mejor discípulo. Sólo un defecto no pude corregirle: su individualismo. Cada vez que cogía el balón se moría con él entre las piernas y se olvidaba de sus compañeros de línea".

La anécdota más sabrosa de este equipo utrerano, nacido del amor por el fútbol de Belmonte, llega con los aromas sevillistas de aquellos que desplegaron la gracia sobre el campo de la avenida de la Reina Victoria:


-Don Juan, una última pregunta, para terminar. ¿Qué jugador le gusta más?

¡Pura torería!

Fuentes; El Heraldo de Madrid (1927) Estampa (1928)