Por una @ de vino.

Me cede gentílmente Carlos Romero este artículo de la prensa de 1922 que no tiene desperdicio.

Recoge primeramente, el abultado marcador tras la disputa de un partido entre el Sevilla F.C. y el Britannia de Gibraltar. 8 a 1 para los locales. La delantera del miedo en todo su apogeo en terrenos del Reina Victoria.

La segunda parte de la crónica hace referencia a otro partido disputado entre dos equipos sevillanos de los años veinte en el campo del Patronato bético, el Carolina F.C y el Pirotécnica Sporting Club.

Una arroba de vino fué "el trofeo" que se disputaban, que pagó el equipo perdedor. Dieciseis litros de vino para festejar la victoria, y supongo que la derrota.

El resultado fué de 5 a cero a favor del Pirotécnica, a pesar de que el Carolina F.C. contó para ese partido con el portero Avilés.

Eduardo Avilés Oliva, considerado uno de los mejores guardametas de la historia del Sevilla con el que consiguió 5 títulos de Copa de Andalucía y participó en 6 eliminatorias de la Copa de España, tuvo el honor de ser el portero del conjunto nervionense en la época de máximo esplendor de la escuela sevillana. Tras un periplo por otros clubes sevillanos, el Nacional F.C (donde militó durante dos temporadas) y el Real Betis Balompié, el jugador regresó al Sevilla, donde volvió a debutar frente al Wanderes inglés (2-2) el 25 de marzo de 1922.

Como era costumbre generalizada en aquella época, los clubs de fútbol se "prestaban" jugadores para disputar partidos concretos y en la crónica que nos ocupa, Avilés que pertenecía a la disciplina sevillista desde marzo de ese año, fué cedido para disputar un partido pocos dias después.

Como decíamos, cinco a cero ganó el Pirotécnica Sporting Club al Carolina F.C.

La Pirotecnia sevillana estuvo muy ligada al fútbol desde los orígenes de éste, no en vano los contactos entre los trabajadores y técnicos de esta industria militar y las industrias mineras de la provincia de Huelva eran frecuentes.

En un plano de Sevilla de los años 20 podemos observar que contaban con campo propio en los terrenos aledaños a los talleres de la Pirotecnia situados en la Avda. Ramón y Cajal y donde hoy en dia se ubican la facultades de Econónicas y Empresariales. En el citado plano podemos apreciar arriba a la izquierda la nueva Plaza de Toros Monumental, y a la derecha el estadio de Nervión en construcción.

Ellos jugaron en Nervión antes que nosotros.

Pero doce años antes, en 1910, por la misma zona de la pirotecnia aparece un intrigante terreno de juego. En el plano de Antonio Poley se observa un rectángulo con una leyenda..."juego de pelota"...

Pd. Gracias a Cornelio por los planos.