“Vengo buscando pelea,
con los cantes que se quieran presentar,
vengo buscando pelea,
que en mi casa tengo yo las de ganar.
Y un respeto al extranjero que su copla presentó,
Pero la nuestra es primero porque somo y español.
Vengo buscando pelea”.
Esto nos cantaba el Silvio, el genial Silvio, sevillista como pocos. Tan sevillista que cuando ni el gin tonic le calmaba la depresión, cogía un taxi, se iba al campo del Sevilla y le decía al taxista que con los faros alumbrara el Escudo Grande. Al rato volvía a casa ya curado.
Buscando pelea otro año más volvemos a Europa. Esta vez de nuevo, como hace cincuenta años, a la Copa de Europa.
Vamos buscando pelea a Londres. Vamos buscando al Arsenal. Vamos a recordarle a esos ingleses, que aunque ellos inventaron el fútbol, donde éste se hizo grande fue al Sur de la Gran Bretaña, en esta escuela sevillana de tantos y tantos artistas del balón.
Después, en el partido, pasará lo que tenga que pasar, pero de momento, con la cabeza muy alta y mirando al frente, vamos buscando pelea.
con los cantes que se quieran presentar,
vengo buscando pelea,
que en mi casa tengo yo las de ganar.
Y un respeto al extranjero que su copla presentó,
Pero la nuestra es primero porque somo y español.
Vengo buscando pelea”.
Esto nos cantaba el Silvio, el genial Silvio, sevillista como pocos. Tan sevillista que cuando ni el gin tonic le calmaba la depresión, cogía un taxi, se iba al campo del Sevilla y le decía al taxista que con los faros alumbrara el Escudo Grande. Al rato volvía a casa ya curado.
Buscando pelea otro año más volvemos a Europa. Esta vez de nuevo, como hace cincuenta años, a la Copa de Europa.
Vamos buscando pelea a Londres. Vamos buscando al Arsenal. Vamos a recordarle a esos ingleses, que aunque ellos inventaron el fútbol, donde éste se hizo grande fue al Sur de la Gran Bretaña, en esta escuela sevillana de tantos y tantos artistas del balón.
Después, en el partido, pasará lo que tenga que pasar, pero de momento, con la cabeza muy alta y mirando al frente, vamos buscando pelea.
1 comentario:
¡A darles caña a los ingleses! A un pueblo que le pone al solomillo salsa de menta y fríe el pescado con mantequilla no se le puede respetar.
¡Para vengar los ultrajes al arte culinario! ¡Contra los dogmáticos del patapúm'pa'rriba! ¡Gibraltar español!
Por favor, qué momentazo de furor patriótico. Por cierto, el Silvio tendría que haber sido todo un personaje. :-D
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